Hoy me siento un poco triste

He estado preparándome desde marzo para este día. El día en que mi hijo pequeño, de apenas 3 añitos de edad, comienza el pre-escolar. Aunque él ya había ido a un cuido de bebés, me aferraba al hecho de que todavía era un bebé. Pero hoy, cuando lo llevé a la escuela, me sentía que esa etapa se desvanecía. Yo sé que seguirá siendo mi «bebé», pero este momento llegó mucho más rápido de lo que me imaginaba. Si lo hubiense visto con su mochilita y bolsito para el almuerzo. El bien orgulloso y seguro de si mismo entró, colocó su mochila en el lugar apropiado y luego se fué con la maestra. El ni siquiera lloró, pero yo aguantaba las lágrimas. Mientras él comenzaba a andar con la maestra, en una paró, se volteó y vino a donde mi para darme un abrazo. Fué en ese momento que me dí cuenta de que todo iba a estar bien. Y es eso exactamente lo más que uno quiere para sus hijos, que estén bien y sean felices.

A todas ustedes que están embarazadas o ya tienen a sus bebés en brazos, disfruten de cada etapa, de cada momento (incluso aquellos que a veces causan molestias) y grábense esos recuerdos, porque en un abrir y cerrar de ojos el tiempo se los lleva volando.